Fotografía de Brayan Ernesto Campo Dagua.
2016. Archivo ONIC.
Fotografía de Brayan Ernesto Campo Dagua.
2016. Archivo ONIC.
Fotografía de Brayan Ernesto Campo Dagua.
2016. Archivo ONIC.
Son los nietos del trueno, los hijos de las aguas, la tierra y las estrellas. Habitan el departamento del Cauca y en nueve departamentos de Colombia. Conservan el Nasa Yuwe, su lengua materna cuyo tronco lingüístico es la Macro-Chibcha; sin embargo, también se ha afirmado que es una lengua aislada.
La organización socio-política se da mediante cabildos, la guardia indígena y asociaciones. El thë’ wala, autoridad espiritual es el conocedor de las plantas de curación y sanador de las enfermedades provocadas por los espíritus ubicados en los lugares sagrados, hogar de los espíritus como el Duende, los sueños y las visiones.
Es el pueblo que más ha luchado en Colombia por la recuperación y ampliación de los resguardos, y es considerado junto con los misak, el fundador de las principales organizaciones y movimientos indígenas en Colombia: El Consejo Regional Indígena del Cauca.
Su población y sus territorios han sufrido múltiples afectaciones por represamientos de los ríos y avalanchas. También, los problemas de seguridad por la persecución y asesinato de sus líderes, la falta de tierras para adelantar las prácticas agrícolas, el conflicto entre grupos armados y los conflictos interétnicos, son afectaciones que desarmonizan y desequilibran la vida y el territorio de este pueblo.
